LENGUA DE VACA, MANITAS DE CORDERO Y RABO DE TORO
Este año ha sido difícil para nuestra economía hogareña, así que Dapsa propone ideas sencillas, económicas y riquísimas para esta nochebuena. Vamos a honrar la vida y a servir casquería en la mesa de Navidad. No es ningún demérito y seguro que dejáis a vuestros comensales alucinados cuando hayan probado cualquiera de estas tres recetas.
LENGUA DE VACA ESTOFADA
La lengua de vaca es el bistec de la casquería. Tenemos la opción de consumirla en frío o estofada. Amén de lo nutritiva que es. En frío – una vez cocinadas – acompañadas de una gran variedad de salsas. Servida laminada, en cortes finos, se parece a un filete Sajonia y pueden ser una agradable sorpresa para vuestros invitados estas navidades.
INGREDIENTES:
Una lengua de vaca, que viene a pesar 1 Kg (para cuatro/seis comensales). Un apio. Una zanahoria grande. Una cebolla morada tipo “Figueres”. Un ramito de perejil. Media docena de cebollitas en vinagre. 2 pepinillos en vinagre. Un limón. Medio vaso de aceite virgen extra de oliva. Medio vaso de aceite de girasol o maíz. 100 gramos de aceitunas verdes sin hueso. 1 cucharada de alcaparras. Sal. Pimienta negra en polvo
- Como la lengua de vaca viene recubierta de una piel dura hay que hervirla unos 5 minutos para retirar la carne con la ayuda de un cuchillo afilado hacemos un corte a lo ancho y retiramos la piel con la mano.
- Usaremos la misma agua para cocer la lengua con el apio, la cebolla y la zanahoria, así como la lengua ya pelada y un puñado de sal. Dejamos cocer durante una hora y media. Una vez cocida y ya fría, la cortamos en rodajas finas.
- Salsa: En un vaso de batidora colocamos los pepinillos, las cebollitas, las alcaparras, los dos tipos de aceite, el zumo de un limón y un puñado de aceitunas (no todas). Sal y pimienta. Batimos hasta obtener una salsa homogénea que vertemos sobre la lengua laminada. Decorar con el perejil picado y los trocitos de las aceitunas. Dejamos enfriar un par de horas en la nevera antes de servir.
MANITAS DE CORDERO PICANTES
Como ya os hemos contado en otras entradas del Blog, las manos de cordero son consideradas un manjar por muchos gourmets. No contienen demasiada carne, pero su sabor delicado, casi gelatinoso, las hacer ser muy apreciadas. Este guiso es la forma más sencilla de cocinarlas, no es rápido ya que requieren tres horas de cocción, pero la preparación nos llevará apenas unos minutos.
INGREDIENTES (4 personas)
3 Kg de manos de cordero. 1 guindilla picante. 1 cucharada de pimentón picante. 3 dientes de ajo. Sal. Aceite virgen extra de oliva.
Limpiar muy bien las manos para que estén libres de pelo, si es necesario chamuscándolas. Las introducimos en una cazuela y las llenamos con agua sin llegar a cubrirlas y un buen puñado de sal. Las tapamos y dejamos cocer unas tres horas.
Cuando las manos están bien cocidas las retiramos del fuego y reservamos el agua.
En una cazuela de barro, freímos los tres ajos majados y cuando empiezan a tomar color añadimos la cucharada de pimentón picante. Seguidamente incorporamos las manitas y el agua de la cocción, además de la guindilla también majada. Dejamos cocer durante media hora más y ya están listas para ser consumidas.
GUISO DE RABO DE TORO
Esta receta es típica de Andalucía, como parte de la gastronomía que gira alrededor del toro de lidia. Ya os hemos contado de ello en otra entrada del Blog, por lo que iremos directo al grano, o al guiso. Este plato es una delicatessen porque el rabo de toro guisado tiene una textura inigualable, gelatinosa. La carne se funde en la boca y la salsa de verduras, ennoblecida con el vino, ofrece un contraste rotundo en el paladar. Es más que probable que no podáis encontrar rabo de toro de lidia. Es un producto escaso y de calidad, porque el toro de lidia se cría en libertad pastando en la dehesa. Podéis emplear rabo de toro de Dapsa, por supuesto. El rabo tiene hueso y la carne es dura, por lo cual la cocción no es fácil. De media se tarda 4 horas en cocinar 2 kilogramos de rabo.
INGREDIENTES (4 comensales)
1 rabo ó 2 que sumen 2 Kg o algo más. 1 puerro grande. 1 cebolla morada grande tipo “Figueres”
1 diente de ajo. 1 pimiento rojo grande. 2 zanahorias grandes. 2 vasos de vino tinto de calidad (medio litro). 2 vasos de caldo de carne de ternera (medio litro). 1 hoja de laurel
Sal. Pimienta. Aceite virgen extra de oliva. Harina blanca.
Para que sea más sencillo, pedir al carnicero que nos trocee los rabos de toro en secciones de dos o tres dedos de ancho. Salpimentar los trozos y enharinarlos. En una cazuela grande con un buen chorro de aceite virgen extra de oliva freír los trozos de rabo por ambos lados. Reservarlos una vez fritos. Y luego en el mismo aceite hay que sofreír el puerro, la cebolla, las zanahorias y el pimiento rojo cortados en dados pequeños, y el diente de ajo entero. Añadir la carne con el vino y el caldo de ternera junto al laurel.
Cocemos durante 3 horas o hasta que la carne se desprenda del hueso con facilidad y el caldo haya espesado. Ahora vamos a sacar el rabo de toro de la cazuela y lo mantenemos en el horno para que no se enfríe (con ponerlo al mínimo será suficiente). Sacamos los vegetales, eliminamos la hoja de laurel y los pasamos por la batidora hasta que quede una salsa fina. Las tajadas de rabo se sirven en el plato regadas por un poco de esta salsa y el resto se pone en una salsera para que el comensal se sirva a su gusto. Y ala, un manjar digno de la Navidad. El acompañamiento ideal es un cubilete de arroz hervido. La mezcla de arroz con salsa es muy agradable al paladar.
Y si no dispones del tiempo necesario, siempre puedes optar por la V Gama de Dapsa. Y obtendrás el mismo sabor tradicional y casero, sin pasarte horas y horas en la cocina. Y entonces solo queda disfrutar y celebrar por todo lo alto la llegada de un año mejor, renovar nuestras esperanzas y deseos, que buena falta nos hace. Que así sea.