Manitas de cerdo en salsa

Hay quien dice que las manitas de cerdo pueden parecer empalagosas de cocinar, y un plato algo más complicado que el resto, pero lo cierto es que es una pieza sabrosa con la que lo único que nos será difícil es olvidar su sabor. El precio también es lo de menos. Conseguir un plato sabroso y que no afecte a nuestros bolsillos no es imposible de conseguir.

Cuando acudimos a la carnicería a hacer las compras de la semana hay una gran cantidad de manjares esperando a ser cocinados. En la actualidad, los alimentos vienen muy limpitos, y la preparación de las manitas de cerdo nos dará muy poco trabajo antes de cocinarlas. Además, ahora no hace falta esperar a que llegue el invierno para degustar algo tan rico, con una copa de vino y el aire acondicionado encendido la estación no importa.

Os podríamos decir cientos de recetas, pero lo cierto es que con las manitas de cerdo en salsa sabemos que es imposible fallar. Con solo su olor, esta receta atraería a cualquiera que en un principio se negase a degustarlas, ¿tienes curiosidad por saber cómo se hace? ¡Es hora de ponerse manos a la obra!

Lo mejor es comenzar chamuscando los pelillos que puedan traer las manitas o pasándoles una cuchilla, al igual que dejarlas en la nevera, en agua fría, durante 24 horas para suelten la sangre. Al día siguiente las pondremos en una olla, cubiertas con agua fría, y las dejamos hervir durante cuatro minutos –empezando a contar cuando empiecen a hervir-. Pasados los minutos desecharemos esa agua y pondremos de nuevo en una cazuela amplia la carne, un poco de cebolla, zanahoria, puerro y especias –con las cantidades al gusto-, cubiertas con abundante agua fría.

Cocemos todo durante tres horas. Cuando finaliza el tiempo de cocción se deshuesan y se dejan en trocitos parecidos a los callos. ¡Ya tenemos la parte más laboriosa resuelta! Ahora es el momento de hacer la salsa. Picamos la cebolla, unos dientes de ajo y salteamos las verduras con un poquito de aceite de oliva hasta que estén blandas. También podemos poner un poco de panceta en trocitos y la sofreímos.

Después añadimos un poco de harina a la vez que vamos removiendo todo para que no se pegue, ponemos un poco de pimentón y vertemos encima el vino blanco –dejándolo reducir durante unos tres minutos para que se evapore el alcohol-. Añadimos salsa de tomate y unos 500 mililitros del agua de cocción. Ahora cocinamos todo junto durante 30 minutos. Sencillo, ¿verdad? ¡Ahora es vuestro turno DAPSEROS!

compartir en redes sociales: