Hoy en día, con las prisas y el poco tiempo que tenemos, se ha ido perdiendo la tradición de comer platos de casquería hechos en casa, como los que preparaban las abuelas. Es más fácil degustarlos en un bar. Pero nos tocan tiempos complejos debido a los confinamientos y la pandemia. Por eso, en Dapsa seguimos acompañando esa cocina de tradición y con materia prima de calidad; ahora más que nunca. Y pensamos en unas recetas de invierno, bien reconfortantes y sabrosas, en esta ocasión con morros de cerdo. Porque se vive mejor con una buena receta, variados puntos de vistas y platos nutritivos que nos regocijen con ese sabor casero y el olorcito que desprende el plato recién puesto en la mesa.
MORRITOS DE CERDO CON TOMATE y un toque picante
Lavamos 800 gr. de morro de cerdo con agua fría. En la olla exprés colocamos: los morros, 1 cebolla pelada y entera, 1 puerro limpio y cortado en dos trozos, sal, unos diez granos de pimienta y el clavo. Cubrimos de agua. Cerramos la olla y cuando suba el testigo de la olla dejamos cuarenta minutos. Escurrimos y cortamos en trozos regulares. En una cazuela ponemos un poco de aceite y echamos los pimientos del piquillo cortados en tiras. Rehogamos unos diez minutos. Mientras se rehoga incorporamos la guindilla cortada en trozos o unas alegrías riojanas. Añadimos los morros troceados y damos unas vueltas. Ponemos el pimentón picante, damos unas vueltas, la carne de pimiento choricero damos cuatro vueltas más, y añadimos la salsa de tomate. Dejamos cocinar a fuego suave hasta que coja el hervor. Dejamos dos minutos y apagamos. Y a disfrutar la vida.
MORRO A LA GALLEGA, con patatas y pimentón.
Plato típico español de Galicia de corte hocicos de cerdo asado con patatas y pimentón. Si preferimos no comprar el morro ya cocido, deberemos ocuparnos de limpiar bien la careta. En una olla cubierta de agua, con sal y un par de hojas de laurel, dejamos cocer unos 40 minutos en olla exprés o en una cazuela normal, alrededor de hora y media. Una vez cocido, cortamos el morro en trozos pequeños. Luego los freímos en aceite bien caliente. Tapamos porque saltan mucho. Pasados unos minutos dejarán de saltar y le pondremos sal y pimienta. Removemos cada 2-3 minutos hasta que estén dorados. Una vez veamos que están fritos echaremos pimentón dulce y un poco de pimentón picante, removeremos y apagamos el fuego. Servir en cazuelitas de barro o en platos de madera, bien calentito, espolvoreados con pimentón y sal gruesa, acompañados con unas patatas cocidas de base y quedará una tapa estupenda.
Morro a la gallega hecho por Segundo Sanz
MORRO DE CERDO CRUJIENTE, con un toque saladito.
Bien frito es un aperitivo exquisito. El torrezno de morro de cerdo gusta a casi todo el mundo. Preferiblemente se cocinan los de cerdo. Es un bocado muy apreciado porque es una carne muy jugosa y una vez frita tiene una textura muy crujiente. Es bastante sencillo, pero no menos sabroso. En las carnicerías nos lo venden adobado, pero también en bolsas al natural. Si nos apetece ir en plan casero, se puede dejar un tiempo con sal y ½ cucharadita de bicarbonato. Luego sofreírlo y agregar otro poquito de sal al final. Otra opción sencilla es cocer una careta durante 10 minutos con sal y laurel. Secar al horno otros 10 minutos. Cortar en cuadraditos con una tijera. Ir preparando la cervecita. Y freír en aceite bien caliente. Retirar y poner en un plato con papel absorbente.
Animaros a probar recetas como estas. Seguro que os van a gustar. Y no olvidéis que en Dapsa enviamos a domicilio, por si os apetece cocinar sin salir de casa. Contamos también con nuestros productos V Gama como los Morritos picantones con alubias , en este caso son de ternera, como ya os hemos contado en una de nuestras entradas pasadas.
